En corro, aunque sentadas, una veintena de chicas de “Vantamos Corral” demostraron que son capaces de cantar algo más que los Mayos. El patio de Doña Leoncia se llenó con sus canciones la noche del 18 de agosto y, en el intermedio, con el homenaje a David Hurtado, la persona que más ha hecho en Corral por dar a conocer esos instrumentos de cuerda que resonaban junto a sus voces.

A sus 80 años, con la vista y el oído un tanto mermados, David permaneció atento al concierto del grupo de mayeras, el único femenino del pueblo, y posiblemente recordó los tiempos en los que intentaba crear una rondalla femenina con las alumnas de las monjas. Ahora, como entonces, los temas que tocaron fueron los habituales, pero con arreglos propios e introducidos por una portavoz del grupo que comentaba el significado que cada pieza tiene para ellas.

En el intermedio del concierto, tres antiguos alumnos de David se encargaron de introducir el homenaje al maestro, al que la Asociación regaló un grabado de Gregorio Luengo. Dos de ellos quisieron demostrar a su antiguo profesor que sus enseñanzas no habían caído en saco roto interpretando sendos temas a la guitarra. Comenzó Jesús García-Arroba, que recordó anécdotas de cuando iba a casa de David a dar “lección” y que interpretó un tema del siglo XVI. Le siguió su primo Miguel Navarro con un tema de la película “El Cazador” y, para finalizar, ambos tocaron a dúo una pieza que apenas habían tenido tiempo de ensayar, pero que sonó decentemente.

El homenaje supuso un reencuentro entre profesor y alumnos después de más de 40 años que concluyó con abrazos de emoción.

El grupo de mayeras concluyó su concierto con otra tanda de canciones y con un pequeño ágape ofrecido por la Asociación, la cual agradece la iniciativa de estas chicas por ampliar el abanico de grupos musicales de la localidad.