La tercera excavación arqueológica realizada en el corraleño cerro del Gollino, ejecutada durante el pasado mes de julio, aporta información interesante a cerca del asentamiento carpetano que existió en el lugar hace más de dos mil años, sobre quienes eran sus habitantes y sobre la cronología de su estancia.
La principal impulsora de esta actuación, la Asociación Amigos de Corral, presentó el pasado sábado los resultados arqueológicos y el informe económico que ha supuesto la actividad, llevada cabo con la colaboración del Ayuntamiento de Corral de Almaguer, la Fundación Rico Rodríguez, la Universidad Autónoma de Madrid y la Universidad de Edimburgo.
Los objetivos de la actuación, explicó Pablo Sánchez del Oro, director de las excavaciones, se centran en caracterizar el asentamiento, precisar su cronología y detallar el tipo de ocupación de este lugar estratégico en la Carpetania que ocupaba el centro peninsular. Los trabajos realizados se han centrado en el primer recinto, ubicado entre dos líneas de murallas donde estaba un edificio de dos plantas, con dos estancias construidas en periodos diferentes, de los que no se han encontrado puertas, ya que solo existen los cimientos de lo que pudo haber sido un almacén, dada la cantidad de cerámicas completas, tinajas, vasijas y piedras de molino que han aparecido.
Los materiales encontrados en el apenas dos por ciento de las dieciocho hectáreas que ocupa el asentamiento se encuentran en proceso de análisis. Cabe destacar el hallazgo fortuito de dos esqueletos, catalogados como Julián y Gregorio, datados por la prueba de carbono en torno al año 1100 de la era cristiana, así como un hueso de oveja localizado en un derrumbe de una muralla y datado entre el año 50 a.C. y el 50 d.C.
En relación al coste de la actividad realizada, el presidente de Amigos de Corral, Pedro Antonio García-Gasco, dio información detallada tanto del gasto como de las cantidades de financiación aportadas por la Fundación Rico Rodríguez, la Escuela de Música, la asociación de bolilleras, el AMPA de la Salle y particulares, a parte del Ayuntamiento y la asociación cultural, que soportan la mayor parte del coste. Asimismo agradeció a los más de cincuenta voluntarios, venidos de toda España, su participación en los trabajos realizados, así como al ISE La Besana, por su colaboración en las labores de lavandería, y al dueño de la finca, José Manuel Galán, por las facilidades dadas para la realización de los trabajos de excavación.
“Lo importante es el proyecto”. Con estas palabras cerraba el acto la alcaldesa de Corral de Almaguer, Manuela Lominchar, remarcado la importancia que estos trabajos, de desarrollo lento, tienen para el municipio.